El año 2018 adquiere un significado especial en esta actualización, ya que en la Recomendación del Consejo sobre la validación se pedía a los Estados Miembros que establecieran, para 2018, disposiciones de validación que permitieran a las personas identificar, documentar, evaluar y certificar sus competencias. La validación es un proceso que tiene por objeto hacer visible el aprendizaje no formal e informal en la sociedad, en el mercado de trabajo y en el sistema de educación y formación, sobre la base de la identificación, documentación, evaluación y certificación de dicho aprendizaje. La validación tiene el potencial de contribuir a la consecución de los objetivos fijados por la estrategia Europa 2020, ya que puede contribuir a la adecuación entre la oferta y la demanda de competencias, apoyando la movilidad entre sectores y países y luchando contra la exclusión social.